martes, 30 de diciembre de 2008

Millenium, el fenómeno del año


Vale, reconozco que el sueco Stieg Larsson ha encontrado la fórmula perfecta para que nos leamos unos tochos de 700 páginas sin pestañear y, sobre todo, para que nos quedemos ensimismados ante un personaje como Lisbeth Salander, esa macarra bisexual a la que le pone el ojo por ojo... También reconozco que prefiero chutarme uno de estos Larsson (La chica que soñaba con un bidón de gasolina; LOs hombres que no amaban a las mujeres; y queda un tercero) a cualquier otro best-seller de los que haya salido este año (lo de las conspiraciones esotéricas no va conmigo).

Ahora bien: discrepo de la Larssonmanía por varios motivos (y no tienen nada que ver con el rollo elitista). Uno es porque me intentan vender peras por manzanas, y eso sí que no. El 'feminismo' de estos libros es grueso y demasiado cutre. Salander es el prototipo de fantasía sexual de cualquier hombre hetero inteligente (tal vez Larsson). ¿Qué ese debe ser el nuevo modelo femenino, o el modelo del siglo XXI? ¿Una vengativa emocionalmente descerebrada? Precisamente, en el lado de las emociones, los personajes no están nada bien creados. Ellas son demasiado duras y ellos, o unos capullos, o unos blandengues. Tampoco los seres humanos somos así.

Los libros de Larsson enganchan porque ha actualizado los resortes del best-seller. Sin embargo, desgraciadamente, se queda ahí. Es superficial. Aunque, como he dicho al principio, son esos libros para leerselos en época de estrés. Entran solos y no le tienes que dar muchas vueltas a la cabeza.

3 comentarios:

  1. A ver, corrotaison, ¿qué papel es el que tendrían que tener las mujeres? En Larsson, porque son muy duras, en Carlotto porque son muy tradicionales... ¿No será usted un poco esquizo?
    Besaco en el morraco ;-) Y conteste, please!

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  2. Cariño, como decía Aristóteles, hay que encontrar el término medio, el equilibrio (que no tiene nada que ver con la mediocridad). Tradicional y excesivamente duras son dos conceptos del patriarcado.

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  3. Oleeee, he encontrado de casualidad tu blog... Ya decía yo que me molaba la selección de libros de 2008... ;)

    besotes,
    m.

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